No todo tiene que ser madera. Puede parecer extraño que justamente esta frase esté escrita en este blog, pero la realidad es esta.

De hecho, como afirma Alejandro Bacelo, Co-CEO de Enpezas, “la madera se tiene que emplear cuando realmente su uso es adecuado”. El primer paso es ser conscientes de las características y cualidades de cada material. Y si, a partir de ahí, el más apropiado es la madera, pues mejor que mejor.

 A la hora de desarrollar las estructuras de las futuras construcciones, el sistema desarrollado por Enpezas potencia el uso de la madera, ya que “a nivel acústico y a nivel térmico siempre va a aportar mucho más que otras construcciones”. Es más, en Enpezas parte del método consiste en confinar toda la estructura a nivel envolvente, por lo que la madera no necesita ningún tipo de mantenimiento.

En cuanto a la selección de los diferentes tipos de madera que utilizan en cada proyecto, lo más habitual es que trabajen con abeto para toda la parte de entramado, con pino rojo para las vigas laminadas y con tableros estructurales OSB, de fibras orientadas, para cerrar los entramados de madera.

El porqué es muy sencillo. Como comenta Alejandro, “seguro que recordamos una casa que tenía vigas de madera y que estaba cubierta con estructura de madera, y seguramente la casa se ha mantenido en pie muchísimos años”. 

¿Y eso hace que una casa sea más sostenible? Por supuesto. Pero hay mucho más. En una construcción estructural en entramado ligero como la que pueden llevar a cabo en Enpezas “solamente se desecha el serrín de los cortes de la madera y de las rozas para el propio OSB”. Con eso consiguen reducir los residuos hasta en un 80% con respecto a una construcción tradicional.

Además, se trata de una construcción “mucho más limpia y mucho más ordenada en la que, incluso los residuos que se generan, se aprovechan para estufas de pelets y una serie de trabajos que buscan el ciclo completo de ese residuo”. Se trata de que ese desecho tenga un nuevo uso, de completar el ciclo sostenible de ese material.

Y es que al final, “la madera es un material eterno si lo cuidas”.