La madera en rehabilitación y en obra nueva

El uso de la madera y el aprovechamiento de las preexistencias son dos de las claves del proyecto de Ezcurra e Ouzande, nacido de la asociación de ambas arquitectas que desarrollan proyectos conjuntamente desde hace años, antes incluso de fundar su propio estudio de arquitectura.

Cristina Ouzande lo tiene claro: “nuestro interés por la madera ya viene de la época de la rehabilitación”. Una querencia por este material que les viene “de ver cómo entras en una edificación que a lo mejor tiene doscientos años y que lo que permanece es la madera, la piedra y cualquier otra intervención que se haya hecho posteriormente con materiales no ha envejecido bien”.

“La rehabilitación es entrar en un edificio, ver lo que vale, el potencial que tiene, lo que te pide y luego usar el material adecuado. La madera es versátil, es natural, es el elemento tradicional que siempre responde. Al final es el material que te permite hacer prácticamente todas las partes de una edificación”, afirma Cristina Ezcurra.

Con el paso de los años y de los proyectos, han ido avanzando hacia nuevos métodos constructivos y hacia una construcción sostenible donde la eficiencia energética, el confort y la belleza van de la mano. 

En cuanto se dieron cuenta de que los sistemas de construcción industrializada y de prefabricación eran el paso inmediato para la obra nueva, lo tuvieron claro. 

En ese momento, ”en vez de ponernos a hacer edificios con materiales que tienes que importar, que no son fáciles de reciclar, que van a permanecer y crear una huella que no quieres” decidieron apostar todo a la madera.

La madera “también tiene esa gran oportunidad, que es ser un material tecnológico que te permite hacer una obra nueva con unos criterios de aprovechamiento, de sostenibilidad y de todas las ventajas que siempre habíamos pensado que eran necesarias en un edificio”, comenta Ezcurra.

El hormigón, el metal y los plásticos, entre otros materiales, fueron desapareciendo de los proyectos de Ezcurra e Ouzande, que buscaban potenciar la sostenibilidad de sus construcciones a través de soluciones tecnológicas en madera.

Según Ouzande, “la madera es un material maravilloso porque es natural y porque el bienestar que transmite no tiene nada que ver con otros materiales” y el hecho de potenciar su uso es “una manera nuestra de entender cómo queremos que se hagan las cosas. Nos interesa ese cuidado, por eso trabajamos con jardines, con cubiertas vegetales, con madera… Buscamos esas soluciones menos agresivas con el medio ambiente”.

Y es que si algo tienen claro en el estudio de Ezcurra e Ouzande es que “no podemos seguir construyendo edificios que no sean sostenibles”.

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