Hace algunas semanas, hablábamos en una entrevista con Ameneiros Rey sobre las reticencias que solían tener los clientes a la hora de utilizar la madera. ¿El motivo principal? La cultura, ya que en un pasado la madera solía estar destinada a construcciones auxiliares, mientras que los edificios principales solían ser de piedra (¡conoce la entrevista completa aquí!). A pesar de que esta situación se ha revertido en los últimos años, lo cierto es que todavía quedan muchos mitos que sobrevuelan las construcciones en madera.
Tanto si te estás planteando embarcarte en un proyecto de construcción de madera como si lo que buscas es reformar una parte de tu hogar (¡echa un vistazo a las tendencias que marcarán el hogar en 2021!), tienes que informarte muy bien y también conocer todos los mitos que rodean la madera. ¿Qué hay de verdad en todo ello? En este artículo queremos dar respuesta a las preguntas más frecuentes sobre las construcciones en madera. Seguro que tú también te preguntaste aquello de:
Todo lo contrario de lo que se piensa generalmente. La madera que tiene un buen mantenimiento, está seca y ventilada puede resistir todo tipo de factores externos como el viento o corrimientos de tierra, incluso, puede llegar a durar más de cien años. Otros materiales, en principio de apariencia más dura, como el hormigón se suelen resquebrajar u oxidar con el paso del tiempo, por lo que su vida útil tampoco es infinita.
De igual manera, recuerda que la tecnología ha avanzado mucho y existen en el mercado muchas soluciones para proteger y asegurar la durabilidad de la madera.
Nada más lejos de la realidad, todos los materiales de construcción están sometidos a la misma normativa y reglamentación de protección contra el fuego. Por lo que, debes sentirte seguro, escojas el material que escojas. Además porque la mayoría de los incendios se producen en objetos que están dentro de la vivienda y no en los elementos constructivos.
Aunque, algo que a lo mejor no sabías es que la madera puede ser más resistente al fuego que otros materiales habituales en la construcción como el hierro o el hormigón. ¿Por qué? La madera, al ser un elemento natural, es un material que ya se autoprotege del fuego. De hecho, si alguna vez has tenido una chimenea, sabrás que los troncos de las maderas duras pueden tardar horas en comenzar a quemarse y, por supuesto, bastante más tiempo hasta que el material se reduce completamente a cenizas. Esto es debido, fundamentalmente, a que la baja conductividad térmica de la madera provoca que el fuego avance más lentamente a su interior.
La madera es un material igualmente válido para realizar construcciones cercanas al mar o a zonas húmedas acostumbradas a la lluvia o a la nieve. O, ¿acaso los barcos no solían fabricarse de este material? De hecho, la madera se comporta mejor en zonas de costeras habituadas a la acción del salitre y la humedad que otros materiales como el acero o el hormigón.
Lo que sí te recomendamos desde woodiswood es que realices un cuidado especial a la madera que tienes en el exterior. Usando protectores, lasur o barniz especial para exteriores podemos lograr que la madera envejezca de mejor forma. Estos productos penetran en la madera y la protegen de la humedad. ¿Quieres conocer todos los trucos para proteger tu madera exterior?¡Echa un vistazo a nuestro artículo sobre consejos prácticos para madera exterior!
Tal vez uno de los mitos más extendidos es que las construcciones de madera contribuyen a deforestar los bosques con su tala, por lo que va en contra de la biodiversidad del planeta. Al contrario de lo que se piensa, la madera es una de las soluciones más sostenibles en construcción. ¿Sabías que la madera es el único material de construcción que es reciclable y renovable? Existen maderas certificadas medioambientalmente que garantizan al consumidor que provienen de bosques gestionados de forma sostenible.
Además, los profesionales de la madera como Ameneiros Rey utilizan la madera como material principal fundamentalmente por su sostenibilidad. Al utilizar maderas locales, se consumen menos recursos del entorno, evitando desplazamientos innecesarios de materiales importados. Por otra parte, la madera tiene unas excelentes propiedades aislantes, por lo que las construcciones de este material suelen ser más eficientes energéticamente.
Las construcciones en madera necesitan el mismo mantenimiento que las construidas con otros materiales. Sin embargo, la madera, al ser un recurso natural, suele estar sujeta a cambios de apariencia con el transcurso del tiempo. De esta manera, el mantenimiento de la madera se suele utilizar también para conseguir que este material envejezca con una mejor apariencia.
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