En Japón se lleva utilizando desde hace siglos una técnica para preservar la madera de una manera muy eficaz y nada invasiva. Hoy te contamos más sobre este tradicional método que cayó en desuso y que últimamente está en boca de todos.

Conocer el material

La madera, como hemos mencionado anteriormente en otros artículos, es un material natural vivo cuya apariencia y forma va cambiando con el paso del tiempo. Por eso mismo, su conservación es un punto importante a tener en cuenta a la hora de escoger este material para cualquier elemento arquitectónico o mobiliario, concretamente en espacios de exterior. ¿Recuerdas que hablamos de los distintos tipos de tratamientos en Consejos prácticos: cómo proteger la madera exterior?

Quemando madera como acabado

El cuidado de la madera forma parte de la elección de un material sostenible, y llevar a cabo un mantenimiento que nos asegure que nuestro espacio o mueble va perdurar en el tiempo adecuadamente, nos hace estar en contacto con este elemento natural. Y sobre todo, nos ayuda a conocer el material que tenemos delante, ya que la conservación no será la misma para todos los tipos de madera y cada una necesitará unos cuidados específicos. Por ello mismo, y echando la vista atrás (muy atrás), queríamos hablar de una técnica tradicional para la preservación de la madera: Yakisugi o también conocida como Shou Sugi Ban

Yakisugi: conservar a través del fuego

Este método natural originario de Japón lleva utilizándose desde el siglo XVI y actualmente es muy popular en occidente. Y te preguntarás… ¿en qué consiste? Pues el propio significado de la palabra nos lo explica: Yaki quiere decir calentar el fuego y sugi es el nombre común de la Cryptomeria japónica, el cedro japonés. Por lo tanto, se trata de una técnica para preservar la madera cuyo procedimiento se basa en la carbonización de la misma. 

Tradicional y principalmente se ha utilizado la madera de ciprés japonés ya que es una madera que se quema de manera uniforme, y a su vez ofrece ligereza y es muy rica en taninos. Pero más adelante te explicaremos qué otros tipos de madera puedes utilizar. ¡Empecemos por el principio!

Conservar la madera por muchos años

A pesar de que hoy en día la técnica ha variado, como muchas otras técnicas tradicionales (especialmente en occidente), te vamos a contar cómo ha venido siendo el procedimiento tradicional. 

A través de la colocación de tres tablas, del largo que cada uno desee y atadas unas con otras de una manera firme con un material resistente, se construye una chimenea. De este modo, se procede a colocar papel en su interior y se enciende como si fuera una hoguera. 

El fuego se extinguirá al cabo de unos ocho o diez minutos habiendo quemado el interior de las tablas en su totalidad. Y aquí es donde viene uno de los puntos clave y es conseguir el espesor de carbonizado deseado para posteriormente limpiar las tablas con agua y dejarlas enfriar. 

Una vez frías, se raspan las tablas con un cepillo para eliminar los restos de carbón. En este punto, la intensidad del cepillado depende del resultado que queramos darle ya que las posibilidades estéticas son variadas. Porque junto con el posterior tratamiento (aceites o barnices), obtendremos distintas texturas y matices

Tabla de madera quemada

¿Vale cualquier madera?

Como hemos mencionado anteriormente, esta técnica se ha desarrollado en Japón a lo largo de los años utilizando la madera de ciprés. Y es la madera recomendada para llevar a cabo el tratamiento de la manera más óptima, pero existen otros tipos que quizás tengamos a nuestro alcance y que nos pueden dar buenos resultados. Lo importante es alcanzar una profundidad de carbonización adecuada, y para ello, serán mucho más eficientes las coníferas o maderas que sean más ligeras.

Un carácter estético poderoso

Si hay algo que llama mucho nuestra atención es el color negro y esa textura tan personal que ofrece cualquier elemento arquitectónico o mueble tratado con esta técnica. Es el caso de edificios como la Casa di Dox de Magaldi Studio en Valle de Bravo en México, el galardonado Barangaroo House en Sydney, la tienda COS en Toronto o la Sleeve House de Nueva York, entre muchas otras. Desde luego, la elección del negro tanto para el diseño de interiores como para revestimientos de exterior es una apuesta hacia la diferencia; y si sumamos el uso de Shou Sugi Ban, nos encontramos ante algo único que aporta tradición y elegancia.

Encuentra tu estilo en woodiswood

El abanico de posibilidades es tan amplio que muchas veces lo único que necesitamos son profesionales especializados. ¿Tienes una idea concreta que quieres desarrollar? ¿O necesitas seguir descubriendo nuevas posibilidades? Acude a los profesionales de la madera de nuestra comunidad woodiswood y encuentra lo que estás buscando. Y si necesitas ayuda, ¡no dudes en contactar con nosotros

¡Únete a la comunidad!
woodiswood
Inspírate y conecta con otros profesionales.
Hecho con amor en Galicia

Entérate de todo lo que pasa:

Suscríbete a nuestra Newsletter y entérate de las novedades de la comunidad.