El oficio del carpintero, al igual que muchos otros relacionados con la utilización de herramientas -como serruchos, martillos, mazos, lijadoras, taladros, caladoras, o destornilladores- y maquinarias; requiere la aplicación de medidas de seguridad para reducir riesgos de accidentes, lesiones o contusiones. En especial, las personas que trabajan en los talleres necesitan proteger los ojos, las manos, el resto del cuerpo, y también sus espacios de trabajo.
A continuación, citamos ocho recomendaciones para que los profesionales de la carpintería se desempeñen en sus talleres con la máxima tranquilidad.
Es importante tener despejadas las zonas de paso para evitar tropiezos, caídas o golpes. La mesa también debe mantenerse siempre limpia y ordenada. De esta forma, se evita que cualquier objeto en desuso, clavos o tornillos interfieran en la manipulación adecuada de otras herramientas.
Tomar medidas, cortar o taladrar forman parte del día a día de un carpintero, por ello, la luz, ya sea natural o artificial, es un elemento vital para la precisión en el oficio. Lo mismo ocurre con la humedad y la ventilación: en un taller de carpintería, la corriente de aire es fundamental para conservar un ambiente saludable que garantice el confort de las personas y, además, facilite la eliminación de residuos como el polvo o restos de aserrín. Los expertos indican que una óptima calidad del aire, además de impactar directamente en la salud de las personas, beneficia al rendimiento laboral.
Es importante verificar, cada cierto tiempo, el correcto funcionamiento de los enchufes, las conexiones eléctricas y los tomacorrientes.
Para cuidar los ojos y evitar que se introduzcan objetos, se recomienda a todas las personas que trabajan en un taller de carpintería la utilización de gafas de protección de lente transparente (también las hay en otros tonos oscuros o ámbar) para facilitar la visibilidad. Se pueden adquirir en cualquier tienda especializada.
En el taller se utilizan, diariamente, muchas sustancias químicas como solventes, pintura, aguarrás, etc. Para reducir los eventuales efectos adversos que estos pueden producir al contacto con la piel o la nariz, es necesario utilizar guantes y mascarillas que cubran nariz y boca.
Es recomendable que los carpinteros utilicen tapones para proteger sus oídos del ruido. Algunas maquinarias o herramientas producen sonidos muy molestos. Por lo general, los tapones son accesibles, económicos y representan toda una inversión para la salud y la comodidad.
Si bien algunas normas son obvias, es importante que todas las personas que trabajan en el taller eviten fumar y consumir bebidas alcohólicas en el recinto y durante sus horas de trabajo.
Todas las personas que trabajan en el taller de carpintería deben conocer las medidas de seguridad para salvaguardar su integridad, la de sus compañeros y evitar accidentes laborales. Es importante que estén capacitados para la prevención de incendios, que sepan cómo deben actuar y utilizar correctamente un extintor.
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